Mandamiento de Bartolomé Lobo, arzobispo de Lima, sobre los escándalos ocasionados por el padre Fernán Báez Martínez, capellán de Nuestra Señora del Prado. Contiene testimonio de Alexandre Armerio, soldado de la guardia del virrey.
Solicitud de Juan Pérez Guerrero y Juan Pérez Merchán, capitanes, a Bartolomé Lobo, arzobispo de Lima, para que no se les prive de los escaños que siempre han utilizado para oír misas y oficios divinos en la iglesia mayor de Pisco.
Bartolomé Lobo Guerrero, arzobispo de Lima, otorga recibo por cantidad de pesos a favor de Joan de Robles, mayordomo, a cuenta de las rentas decimales para su uso en obras pías.