Juan de Murga autoriza a los administradores de alcabalas abonar cantidad de pesos a Pedro Romero, capitán, cargando dicho monto a su cuenta en la Real Administración.
Juan de Murga, caballero de la Orden de Santiago, alcalde ordinario de Lima, albacea de Antonio Lobo de Melo, presbítero, capellán de la capellanía que fundó Leonor de Vargas, contra Juan de Orellana sobre cantidad de pesos por los corridos de un censo impuesto en una casa y huerta ubicada en la calle de San Jacinto, a favor de dicha capellanía. Incluye testimonios de escritura. Ante Pedro Fernández de Abasto, alcalde ordinario de Lima.