Testamento de Manuel de Azante, natural de la isla de Zante en el reino de Venecia, donde nombra como albaceas a Pedro Manuel, Jorge de Candia y Nicolás de Candia; y como herederos a sus hijos Gabriel de Sante, mestizo, residente en el Colegio de los Teatinos, y María Manuela, mestiza, esposa de Mateo Gregorio, residente en Manila.
Manuel de Azante y Jorge Capelo se dan carta de pago y finiquito debido al pleito que ambos tienen por una compañía que habían contituido juntos. Jorge Capelo solicita a Manuel de Azante la mitad de sus bienes y hacienda, pidiendo que le devuelvan una caldera y otras cosas que le había entregado. Por otro lado, Azante pide a Capelo el pago y cuenta de la cantidad de aguardiente y vino, entre otras cosas que le había entregado. La causa fue seguida ante el teniente corregidor de Ica.