Cristóbal Romero, presbítero, capellán real ecónomo y colector de la Santa Iglesia Catedral, contra Carlos Palacios, por injurias de obra y de palabra inferidas a Inocente Cosío, marido de Juana Romero, esclava del licenciado Romero. Ante Francisco López, auditor de guerra.
Testimonio de los autos seguidos por Basilio Dávila y Torres, en nombre de Cristóbal Romero, licenciado, presbítero y colector de las buenas memorias de la Catedral de Lima; sobre entrega de testimonio de la causa que trata con Eugenio Valdivieso, por exhibición de cantidad de pesos. Ante Juan Manuel de Buendía, marqués de Castellón, alférez real y alcalde ordinario de Lima. Expedido por Gervasio de Figueroa, escribano de su majestad.