Cristóbal de León y Carbajal contra el pulpero Luis de Avila, por cantidad de pesos de unos estribos de plata. Ante Pedro Bravo de Rivero, oidor decano de la Real Audiencia y auditor general de Guerra.
Certificación expedida por Cristóbal de León y Carbajal sobre escritura de venta otorgada por María Josefa y Rosa Gabriela de Zubieta, seglares en el Monasterio de la Concepción, herederas de Pedro Zubieta, canónigo que fue de la Catedral de Lima, a Evarista Llanos y Tamayo de una huerta con una casa principal y una casita en el pueblo del Cercado.